domingo, 5 de mayo de 2013

EL TECHO DE CRISTAL


Cuando hablamos sobre el techo de cristal en clase me quede con ganas de saber más sobre él ya que nunca lo había oído y me pareció un buen tema del que poder hablar.

"Solo un 3% de los directivos de empresas europeas son mujeres, y solo el 14% son miembros de los consejos de administración. Esta situación está cambiando, pero según la Unión Europea, a este ritmo, habrá que esperar 50 años para conseguir una igualdad efectiva."

¿Existe realmente una barrera invisible en el trabajo que evita que las mujeres suban de puesto? Se puede pensar que esta barrera es construida por hombres que no quieren mujeres en los mejores puestos de trabajos porque se sienten amenazados y prefieren mantenerlas abajo, pero analicemos la verdadera situación.

Hay techos de cristal en todas las profesiones pero sobre todo en las de alto grado, en las que hay pocas mujeres: política, industria, economía…todos ellos colectivos líderes, por lo que se podría decir que vivimos en una “sociedad dominada por los hombres”.
Podemos ver que los hombre ocupan los cargos con más poder: presidentes de los países, la mayoría de altos mandos… pero esto no representa como viven todos los hombres. Sí, los hombres están en la cima, pero buscando información descubrí que también están al fondo, mueren más jóvenes, tienen los peores trabajos, el 97% de las lesiones laborales son de hombres, el riesgo es mayor en sus trabajos, como los hombres que trabajan en la construcción, y cuando la gente habla de “dominación masculina”, los hombres “ganadores”, no solo dominan a las mujeres, también dominan al resto.

Existen muchas razones por las cuales ciertas personas aceptan altos cargos y otros no. Algunos techos de cristal son por falta de habilidades, por la clase social, la educación recibida, creencias religiosas, políticas…y se pueden encontrar en individuos de ambos  sexos. De hecho es ridículo decir que las mujeres son un caso especial.
En el caso de las mujeres si no suben de puesto en las compañías puede que generalmente se deba a que al ser madres dan más prioridad a sus hijos que a su trabajo. Por la misma razón se ausentan del trabajo los meses libres tras dar a luz y sienten la necesidad de estar cerca del hogar para cuidar a sus hijos, por lo que tampoco pueden hacer viajes de negocios y tener largas jornadas de trabajo. Tienen que decidir entre cuidar a sus hijos en casa o seguir su carrera trabajando, porque ser madre y al mismo tiempo tener una gran responsabilidad en el trabajo es una situación complicada.

Aun así esta situación está cambiando a mejor porque al margen de estas razones que podrían llegar a explicar este suceso, lo que realmente importa son las ganas que tenga cada uno para realizarse en su trabajo y el esfuerzo que ponga en ello, si de verdad quieren un alto puesto que se les ofrece encontrarán la manera de poder complementar su vida personal con su vida laboral, ya sean hombres o mujeres.

Marta I.

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